Y todo vuelve a su cauce... :)

No, nunca.

Hay días y personas. Esas personas con las que has compartido gran parte de tu vida. Sí estoy hablando de mis amigos y mis amigas. Y ves que un día todo se echa a perder. Que por una simple tontería todo lo que habíais ido construyendo durante quince años se derrumba. No yo no puedo soportar eso... Miro la pantalla del móvil mientras los WhatsApps se van sucediendo uno tras otro y mis lágrimas resbalan por mis mejillas. Impotencia. Si esa es la palabra. Impotencia por no saber que hacer o que decir, porque si te callas eres malo, y si hablas eres peor... ¿Qué hacer? Pensar. Reflexionar. Temer lo que pueda deparar tal situación. Yo creo que lo mejor es empezar de nuevo.. Y es que al final nada sale a la luz. Es mejor guardarse lo pensado que sacar lo dicho. Vuelvo a mirarlos uno a uno. No. No quiero separarme de ninguno por muy arta que este de esta situación. No. No pienso dejarlos. Porque cada uno por un lado es simplemente eso, él o ella mism@, pero juntos somos algo más que un simple grupo de amigos que ríen y se divierten. Por esos buenos momentos no pienso abandonarlos. NUNCA

Última noche en la Tierra

Cojo aire, empujo mi voz, puede que no vea el final. Última noche en la Tierra y tal vez, no vuelva a verte jamás. Digo no. No lo acepto, yo digo no. Junto a mi, un amor; un final para los dos. Una luz, un dolor nuestro último adiós; nuestra última canción.  Dime que, solamente una vez más, una noche más, dime que estaremos tu y yo. 

Última noche en la tierra.-La Musicalité

Try to take on the world

Hay días que te levantas con ganas de comerte el mundo. Con esa sonrisa que nadie te va a poder quitar en todo el día. Empezar viendo el lado positivo de tu vida. Pensando que este día va a ser para ti, porque te lo mereces. Hoy caminas mirando al frente, nunca al suelo. Con la cabeza alta, que eso nunca está demás, y ese andar típico que te caracteriza. Y te paras a mirarte en un espejo. De frente, de lado, al revés, por delante, por detrás... Todo bien. Quizá mejor de lo normal. Continuas tu trayecto. Hacia algún lugar, quien sabe donde. Y quizá te apetezca hacer alguna que otra locura. Saltar porque sí. Gritar. Reír sin ninguna razón. No obedecer ninguna norma. Ser tú por una vez, por un día. Darle un beso tan apasionado y a la vez tan dulce que no se lo espere ni él mismo. Echarte mil y una fotos con ellas. Y anochece. Vuelves a casa, pero no para quedarte, si no para calzarte los tacones más altos que tienes. A veces también necesitas sentirte una princesa. Es por un día, por una noche. Sales y bailas, lo das todo, porque hay pocos días como ese en los que te sientes tan bien y agusto contigo misma. Ahora sí. Vuelves a casa a las tantas de la madrugada. Y te acuestas feliz pensando que has conseguido tú propósito. Esperando que pronto vuelvas a levantarte otra vez con aquella ilusión por comerte el mundo.

Tiempo al tiempo

"Tiempo al tiempo", fue lo que dije aquella tarde. Y no entendiste lo que quería decir. ¿Ahora lo pillas verdad? No, tranquilo. No era nada de lo que te tuvieras que preocupar, o al menos no por el momento. Y paseo mis dedos por tu piel y te miro a los ojos una vez más y sonrió  ¿Viste? Ya no soy aquella niña con la que comenzaste. Ya maduré, un poco, pero lo hice.